domingo, 22 de marzo de 2015

Reseña “El Vendedor de Pájaros-Hernán Rivera Letelier”

Inicie mi tercera semana en la universidad leyendo este libro de uno de mis escritores favoritos, yo nací en la segunda región, donde se centran las mayoría de las historias del escritor, esta vez trata sobre el paso del tren, la acción de las mujeres pampinas y por supuesto de los pajaros.
Resumen Oficial:
El vendedor de pájaros es el único pasajero del tren que baja en Desolación.  “El lugar es tan yermo triste y desamparado que ni siquiera los jotes lo sobrevuelan”. Como todos los miércoles, el tren Longitudinal Norte se detiene jadeante. Es raro que alguien baje en esa estación, pero esa tarde lo hace el pajarero. Su llegada no pasa inadvertida; allí está un grupo de amigas que acude a observar semanalmente quiénes serán los amantes que huyen esta vez. Allí los niños que lo siguen como si fuera un árbol de lleno de aves, allí el odiado jefe de vigilancia, quien ha sido informado de un mercachifle anarquista que promueve la insurrección en la pampa.
“Era triste la oficina Desolación. Triste como su nombre. Ni siquiera tenía una banda de músicos que tocara retretas los domingos en la tarde como las demás salitreras”.
En El Vendedor de Pájaros Hernán Rivera Letelier lo hace de nuevo: conmueve a los lectores a través de su singular prosa, mostrando una nueva faceta de la vida salitrera. En esta ocasión, nos muestra a un grupo de mujeres entrañables, heroínas anónimas como tantas nortinas que lucharon hasta dar la vida por su dignidad y la de los suyos.
Resumen Propio:
Desolación era como el infierno, porque ni los jotes lo sobrevolaban, el vendedor de pájaros es el único que tiene que bajar en la estación del tren Longitudinal Norte, allí se encontrara con un pueblo tan desolado como su nombre pero también con mujeres entrañables, fieras dispuestas a ser agente de cambio en la fría vida del árido desierto.
Critica:
Menos de un día tarde en terminar “El Vendedor de Pájaros”, el que compre en Santiago por encargo de mi papá, es uno de mis escritores favoritos, realmente su prosa sencilla es muy revitalizante, leí cada pequeña parte del libro con una emoción de saber cada cosa nueva de él, con leves referencias a sus anteriores libros, pero con una prosa renovaba Rivera Letelier vuelve a recordarnos los problemas obreros de la época como ya lo había hecho en “Santa María  de las Flores Negras” y “Mi Nombre es Malarrosa”.
El libro tiene personajes que son fáciles de querer que tejen una trama llena misterios, tan pequeños como una persona o tan grandes como un pueblo, las injusticias sociales duelen, te dan rabia y ganas de estar ahí y haberlo detenido, lo que lo hace realmente humano, a pesar de que después de “El Escritor de Epitafios” tenía poca fe en el venidero trabajo de Rivera Letelier este libro me emociono, fue como volver un poco a sus raíces, a lo bueno de sus raíces.

Mi puntuación es 3,5 estrellas de 5.

No hay comentarios:

Publicar un comentario